EMV, o Europay-Mastercard-Visa, es un estándar global para crédito y debit transacciones con tarjeta. Utiliza tecnología de chip para aumentar la seguridad y reducir el fraude en las transacciones con tarjeta presente.
RFID, o identificación por radiofrecuencia, es una tecnología que utiliza campos electromagnéticos para transferir datos e identificar un objeto de manera única. Se puede utilizar en numerosas industrias, incluidas la venta al por menor y el transporte.
Estas dos tecnologías pueden usarse juntas en tarjetas de pago sin contacto, donde el chip EMV almacena información de la cuenta y la RFID la transmite a una terminal de pago. Sin embargo, cumplen diferentes propósitos en la seguridad general de las transacciones y no son necesariamente intercambiables. Aquí hay una guía detallada:
¿Qué es el EMV?
La tecnología EMV, también conocida como "tarjetas con chip" o "tarjetas inteligentes", utiliza microprocesadores incorporados para mejorar la seguridad de las transacciones de pago. Estos microchips almacenan y protegen los datos del titular de la tarjeta, lo que hace prácticamente imposible que los estafadores accedan a la información robada y la utilicen.
Cuando se inserta una tarjeta EMV en una terminal con chip o se toca un lector sin contacto, el chip crea un código de transacción único que no se puede volver a utilizar. Esta capa adicional de seguridad reduce significativamente el fraude por falsificación en comparación con las tarjetas de banda magnética tradicionales.
Además de la seguridad mejorada, la tecnología EMV también ofrece comodidad para los viajeros internacionales. Los chips EMV se aceptan en más de 130 países en todo el mundo.
Sin embargo, la tecnología EMV no está exenta de desafíos. La transición a EMV ha requerido que los comerciantes actualicen sus sistemas de punto de venta y los emisores de tarjetas para volver a emitir tarjetas con tecnología de chip. A pesar de estos desafíos, los beneficios a largo plazo de EMV lo convierten en una inversión que vale la pena tanto para las empresas como para los consumidores.
¿Qué es la tarjeta RFID/NFC?
RFID (identificación por radiofrecuencia) y NFC (comunicación de campo cercano) son tecnologías que utilizan ondas de radio para comunicarse entre un transmisor y un receptor, generalmente para identificar y rastrear objetos.
NFC es un subconjunto de RFID que permite la comunicación bidireccional y, a menudo, se usa en pagos móviles o intercambio de datos entre dispositivos. Utiliza alta frecuencia (13.56 MHz) ondas de radio y normalmente tiene un alcance de unas pocas pulgadas.
NFC es particularmente útil en entornos minoristas, donde se puede usar para pagos sin contacto a través de dispositivos móviles. En este caso, el HF/NFC Incrustación RFID actúa como un proxy para la información de la tarjeta de crédito almacenada en el dispositivo.
Siempre que RFID o Etiquetas NFC pasan por un lector, transmiten su información de identificación única, lo que permite el procesamiento de pagos. Sin embargo, incorporan medidas de seguridad, como la tokenización, para garantizar que solo se puedan realizar transacciones autorizadas.
EMV frente a RFID: ¿cuál es la diferencia?
Si bien la tecnología RFID se puede utilizar para el procesamiento de pagos sin contacto, no es lo mismo que la tecnología EMV (Europay, Mastercard y Visa). La tecnología EMV se refiere específicamente al crédito basado en chip y debit tarjetas que procesan pagos mediante autenticación dinámica.
EMV es un reemplazo directo para las tarjetas de banda magnética y ofrece seguridad mejorada mediante el uso de datos encriptados. Además, estas tarjetas no se deslizan sino que se sumergen en un lector de tarjetas, lo que aumenta aún más la seguridad.
Por otro lado, la tecnología NFC/RFID es 100% sin contacto. No requiere contacto directo con un lector de tarjetas. Por ejemplo, un cliente que usa NFC para realizar un pago puede simplemente sostener su dispositivo cerca del lector, sin tener que entregar físicamente su tarjeta o teléfono.
Esta conveniencia excepcional, combinada con medidas de seguridad mejoradas, ha convertido a la tecnología NFC/RFID en una opción popular para pagos sin contacto. También se puede utilizar para otras tareas, como el seguimiento del inventario en entornos minoristas o el control de acceso a edificios y eventos.
Si bien la tecnología EMV y RFID/NFC tienen sus ventajas y, a menudo, se usan juntas en el procesamiento de pagos, tienen diferentes propósitos y no deben confundirse con lo mismo.
Beneficios de NFC sobre EMV
Si bien estas tecnologías son brillantes, no están exentas de inconvenientes. Aquí hay algunas ventajas de usar RFID/NFC sobre EMV:
- Conveniencia mejorada. El aspecto sin contacto de NFC permite una experiencia de pago rápida y sin problemas. Esto puede mejorar enormemente la experiencia del cliente, ya que no tienen que entregar físicamente su tarjeta o teléfono para completar la transacción.
- Seguridad mejorada. Cuando se usa junto con otras medidas de seguridad, como la tokenización, NFC puede proporcionar una capa adicional de protección contra el fraude y las transacciones no autorizadas.
- Versatilidad. NFC se puede usar para una variedad de propósitos más allá del procesamiento de pagos, como el control de acceso y el seguimiento de inventario. La tecnología EMV se limita principalmente al procesamiento de pagos.
Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que tanto EMV como NFC/RFID ofrecen una seguridad mejorada en comparación con las tarjetas de banda magnética tradicionales. Como tal, las empresas deben mantenerse al día con la última tecnología para brindarles a sus clientes opciones de pago seguras y convenientes.
¿Cuáles son las desventajas de NFC sobre EMV?
Hay algunas desventajas potenciales al usar NFC/RFID sobre EMV.
- Costo. La tecnología NFC puede ser más costosa de implementar para las empresas, ya que es posible que necesiten actualizar sus lectores de tarjetas y sistemas de punto de venta. Además, la instalación de los lectores, el software y la capacitación de los empleados pueden aumentar el costo.
- Susceptibilidad al Skimming. Si bien la tecnología NFC incluye medidas de seguridad para evitar transacciones no autorizadas, aún existe el riesgo de skimming, donde un ladrón roba información de un Chip RFID utilizando un dispositivo especial. Los chips EMV son menos susceptibles al skimming porque requieren contacto directo con el lector de tarjetas.
- Disponibilidad limitada. La tecnología NFC no es tan ampliamente aceptada como EMV, lo que significa que es posible que los clientes no siempre puedan usarla para sus pagos. EMV es más ampliamente adoptado y aceptado en un mayor número de establecimientos.
Afortunadamente, la aceptación de la tecnología RFID/NFC está aumentando, lo que la hace más accesible tanto para las empresas como para los consumidores. Debe sopesar las ventajas y desventajas antes de implementar la tecnología NFC/RFID/EMV para su empresa.
Además, los clientes pueden utilizar Bloqueo RFID monederos/titulares de tarjetas para proteger su información contra robos. Las empresas también deben mantenerse al día con las últimas medidas y actualizaciones de seguridad para evitar transacciones no autorizadas y proteger la información del cliente.
EMV frente a RFID: ¿cuál es mejor?
No hay una respuesta única a esta pregunta, ya que tanto la tecnología EMV como la NFC/RFID tienen sus ventajas y desventajas. En última instancia, depende de las necesidades y preferencias específicas de la empresa y el cliente.
En algunos casos, el uso conjunto de ambas tecnologías puede brindar la experiencia más segura y conveniente para todas las partes involucradas. Ofrece diversidad en las opciones de pago y puede atender a un público más amplio.
Sin embargo, las empresas deben considerar cuidadosamente el costo y el esfuerzo involucrados en la implementación de ambas tecnologías antes de tomar una decisión. En general, mantenerse informado y actualizado con los últimos avances en tecnología de pago es fundamental para garantizar transacciones seguras y clientes satisfechos.